Para los próximos años, se vislumbra la posibilidad de que los temas estratégicos de país se conviertan en políticas de Estado, entre ellos la educación. Temática sobre la que, durante los últimos 15 años, se ha generado un debate significativo, encaminado a lograr macro consensos. Si bien muchas de las consultas han sido limitadas hay acuerdos de priorización e importancia para el desarrollo nacional, enfocados en la necesidad de una educación integral. La proyección social del nuevo gobierno y los desafíos nacionales e internacionales hacen que sea un imperativo lograr que las políticas públicas se traduzcan en políticas de Estado. Lo que implica pasar de un sueño deseable a una realidad posible. El reto no es sencillo, demanda la apertura y participación sostenida de todos los sectores. Debe dialogarse, concertarse y compartirse el diseño y la ejecución de la política pública. Es decir, retomar una auténtica participación sostenible, que implica diferenciar los espacios y los nivel
Espacio de estudios educativos. Felipe Rivas Villatoro