La aprobación de los préstamos externos en educación brinda una oportunidad para el debate nacional sobre el financiamiento necesario para sacar adelante al país que queremos, como indica uno de los títulos del Plan Nacional de Educación 2021. Además, permite transformar el escaso debate legislativo, la visión partidista y las negociaciones poco transparentes, en temas de fondo que aporte a la visión compartida de largo plazo y abone a la política de Estado que tanto requiere el país en esta área. El tema de fondo es el financiamiento global de la educación con base a metas, estrategias y presupuestos claros, bien elaborados, coherentes y competitivos. El análisis de las necesidades educativas nacionales requiere el incremento del presupuesto nacional y de recursos externos, pero no exclusivamente de préstamos internacionales; es necesario una estrategia para captar mayores recursos del sector privado y de la cooperación internacional, a quienes se les debe recordar parte de los compro